sábado, 18 de mayo de 2013

NADA DEJA DE TENER SENTIDO.

Mi querida alma que tanto has vivido, hoy pongo fin a todo tu sufrimiento. Hoy he dedicado mi día a reflexionar sobre mi vida, sobre las circunstancias de las cosas, sobre el futuro, sobre todo un poco, y he llegado a la conclusión de que no puedo más. No puedo, y esto va a cambiar. 

Creo que he valorado las cosas desde una perspectiva más externa y he considerado que mi vida debe dar un giro total. Así que me he mirado al espejo y he dicho: "¿Por qué no? Ahora es el momento."
Creo que no todo en esta vida es sufrir y, si aún sigo aquí, es porque el destino me deparará algo, solo depende de mí que sea un futuro incierto y peligroso, o seguro y esperanzador. 

De modo que hace un rato hice mis maletas y me embarqué rumbo al horizonte. No tengo ni mapa ni brújula, es cierto, pero no me hace falta. Solo con mis ganas de vivir el camino se construye por sí solo. Creo que mi decisión es digna de admirar porque no todas conseguimos escapar de las garras del pasado y de esa persona que nos tiene retenida de por vida. 

Y es que hoy he dejado atrás malos tragos y momentos amargos, hoy he decidido dar un portazo y encerrar en un cuarto oscuro todo lo sufrido, hoy he vuelto a ver la luz del sol, sintiendo en mi piel el aire y saboreando la libertad que yo misma he buscado. Hoy he vuelto a nacer después de la agonía que he pasado, aún peor que la misma muerte. Hoy he conseguido cumplir mi objetivo, mi propósito. Hoy nada me aflige y a nada le temo. 
Porque hoy le he dicho adiós al hombre que me ha hecho daño, porque hoy vuelvo de nuevo a ser yo.